Tras casi tres años de política Covid cero basada en restricciones masivas a la movilidad –desde principios de 2020 hasta finales de 2022–, las perspectivas de negocio de las empresas españolas que exportan a China solo pueden mejorar, incluso con la amenaza de que volverán. prohibición ante el estallido de varias epidemias que derrumbaron hospitales y morgues. A pesar del duro entorno para las pymes arraigadas en los gigantes asiáticos, todos los consultados dijeron que ven una luz al final del camino.
“Tenemos un gran desarrollo en China con la marca Hermosa bailarina de balletpero es cierto que con las restricciones por el coronavirus hay un frenazo importante en el consumo”, ha dicho David Bell, máximo responsable de la marca de calzado de mujer perteneciente al grupo Mascaró. Según Bell, Mascaró ha firmado “un acuerdo con un grupo importante de centros comerciales para establecer la esquina de Pretty Ballerinas”, pero el acuerdo está “en suspenso hasta que se eliminen por completo las sanciones”.
Pekín, el mayor mercado mundial, sigue siendo atractivo para las empresas españolas
Por no hablar de abandonar el mercado más grande del mundo a pesar de la insensibilidad económica que pueda mostrar el gobierno de Xi Jinping. “China sigue siendo un país atractivo para los exportadores españoles que ven en Asia una región para desarrollar su negocio”, afirma Ramón Gascón, coordinador del grupo de trabajo Asia Pacífico del Club de Exportadores e Inversores.
Entre los destinos más habituales de las empresas españolas en la región, los principales países asiáticos son China, India, Vietnam, Bangladesh, Malasia y Taiwán. De esos seis, Beijing sigue representando el 67% de las exportaciones, a pesar de un revés este año debido a las sanciones. Según los datos de comercio exterior de la web de la Secretaría de Estado de Comercio, solo en China se produce un descenso del 11,7% en las exportaciones españolas entre 2021 y 2022 (en el acumulado de enero a septiembre), frente al 24,5% interanual. -aumento de años en la India; 15,1% en Taiwán; 30,2% en Malasia; 5,2% en Vietnam y 30,5% en Bangladesh.
Las empresas dicen que es un destino principal, pero aún es difícil acceder
Sin embargo, ahora se exporta más al mercado chino (casi 5.900 millones de euros) que en los primeros nueve meses de 2019 (4.800 millones), el año previo a la pandemia. Y es, con diferencia, el destino más importante para las empresas de la región, y las exportaciones a la India se han cuadriplicado.
“Para muchas empresas sigue siendo un mercado de difícil acceso ya la vez ineludible si se quiere expandir en esta región”, afirmó Gascón. “Sin embargo, para las pymes españolas, la importancia de contar con canales tanto presenciales como online, y su crecimiento exponencial este año, es una tremenda oportunidad”.
experiencia de servicio Naturaleza de Bissé, una marca de productos cosméticos que incursionó en este mercado hace una década. “Sin duda, la política de Covid cero ha afectado a nuestro negocio, especialmente en la primera mitad del año, cuando las medidas y los confinamientos son más duros”, admite Juan Albanell, consejero y director comercial. “Además, una parte muy importante del negocio está enfocada en los canales de spa de día (salón de belleza) y spa de hotel, canales que están sufriendo directamente las medidas restrictivas”.
“A pesar de esta situación”, prosigue Albanell, “hemos continuado con nuestra estrategia inversora en la etapa de team building y expansión de distribución y desarrollo de marca. La situación actual es temporal, y cuando se suavicen las medidas, China volverá a ser el motor del crecimiento y queremos estar 100% preparados”.
Efecto de terminación
“Las empresas españolas que operan en China están relativamente consolidadas”, decía un informe publicado en octubre por el Foro de Marcas Famosas Españolas (FMRE) e Icex. En general, las restricciones han afectado mucho: “El covid ha tenido un impacto significativo en el negocio de las empresas españolas en China, lo que se ha traducido, en muchos casos, en interrupciones en la cadena de suministro, la imposibilidad de que el personal relevante viaje por negocios de la empresa y la postergación o reducción de planes comerciales o de inversión”.
El informe identificó desafíos como “identificar sectores de oportunidad en este mercado, posibles cambios regulatorios y la evolución de la relación de China con sus socios internacionales”. Y para las pymes españolas se valora “la conveniencia de establecer alianzas con otras empresas con experiencia en el mercado” que “sean capaces de compartir conocimientos de cultura empresarial, trabas burocráticas, o compartir infraestructuras logísticas o financieras”. .
En comparación con las exportaciones, las empresas que importan productos chinos no notan muchos cambios a lo largo de 2022. Como Laboratorio de la Dra. Barba, con sede en Madrid y fundada por el economista Juan Carlos Barba, importa productos de higiene. “Las restricciones pueden tener un impacto importante en los tipos de exportaciones españolas, como los alimentos, que están relacionados con actividades económicas que se ven muy afectadas por el Covid cero. Pero en lo que respecta a la importación, solo tenemos algunos retrasos importantes”.
Propiedad en problemas
Buen pronóstico. Según Enrique Díaz-Álvarez, analista y director de riesgos de Ebury, el tecnología financiera Especializado en gestión de divisas para pymes, el objetivo de Pekín de crecer un 5,5% este año ya está fuera de discusión: el crecimiento de China en el tercer trimestre (3,9%), tras una contracción trimestral en el segundo trimestre (2,7%) y el final del la política de covid cero abre la ventana al optimismo.
Incertidumbre. El Gobierno lanzó en agosto un plan de ayudas por valor de un billón de yuanes (135.000 millones de euros) para apoyar a las empresas, en particular al sector inmobiliario más afectado, donde las propiedades siguen perdiendo valor. A diferencia de la UE o los EE. UU., China sigue relajando su política monetaria para tranquilizar a los consumidores.